Según los especialistas afirman que la edad para bañar tu cachorro por primera vez debe ser a una edad que minimice el peligro de salud para tu peludito y con los productos e suministros adecuados.
- Edad Adecuada: Es recomendable esperar hasta que tu peludito tenga al menos 8 semanas o 3 meses de edad antes de darle su primer baño,, y antes de eso no tienes porque preocuparte ya que su propia madre se encarga de la limpieza.
- Preparación: Antes de comenzar, reúne todos los suministros necesarios, como un tina de tamaño adecuado en caso no tuvieras bañera, champú para cachorros que sea suave y seguro, toallas, un cepillo con cerdas suaves y algodón para proteger los oídos.
- Temperatura ideal del agua: Asegúrate de usar agua tibia, es decir no demasiado caliente ni fría.
- Introducción gradual: Antes de comenzar a mojar a tu cachorro, deja que se familiarice con el ambiente del baño y los sonidos del agua. Puedes dejar que explore la bañera o tina vacía antes de agregar el agua poco a poco.
- Acondicionamiento positivo: Haz del baño una experiencia positiva para tu cachorro. Ofrécele recompensas, elogios y juega con él antes y después del baño. Esto ayudará a que asocie el baño con y como algo agradable.
- Lavado suave: Utiliza un champú suave y seguro diseñado específicamente para cachorros. Asegúrate de enjabonar y enjuagar completamente, evitando que entre agua y jabón en su ojos, nariz y oídos (aquí puedes usar el algodón en forma de tapón si deseas).
- Secado adecuado: Después del baño, seca a tu cachorro con toallas suaves y limpias. Si utilizas un secador de pelo, utiliza la configuración más baja de calor y mantén cierta distancia para evitar quemaduras (30cm a más).
- Cuidado de oídos y ojos: Después del baño, asegúrate de limpiar suavemente los oídos de tu cachorro con una solución recomendada por tu veterinario, o también puedes utilizar una bola de algodón humedecida con agua tibia para limpiar delicadamente alrededor de los ojos.
- Cepillado: Una vez que tu cachorro esté completamente seco, utiliza un cepillo con cerdas suaves para cepillar su pelaje. Esto ayuda a mantenerlo limpio, libre de nudos y a estimular la circulación sanguínea en la piel.
- Frecuencia de baño: Los cachorros no necesitan bañarse con demasiada frecuencia, a menos que estén realmente sucios o hayan estado expuestos a algún tipo de sustancia.